Hay una canción en el mundillo infanto juvenil que ha sido heredada de generación en generación, dice así:
¿Qué tengo en mi mano? Un gusanito
¿Con qué lo alimentamos? Con pan y quesito
¿Con qué le damos agua? Con un botecito
¿Lo matamos, lo matamos? No, pobrecito
Nadie sabe donde está el dichoso gusanito, quizá se fue con Mambrú a la guerra (?)
Responde esta pregunta: ¿Qué tienes en tu mano?. ¿Un mouse? ¿un libro, una pelota de fútbol, un título colegial, una cuchara, un lápiz, una guitarra? Resulta que lo que tengas en este momento en tus manos podría ser la herramienta que Dios va a usar para hacer cosas asombrosas, milagrosas, increíbles, extrañas o sorprendentes. ¡O todas ellas!
Moisés había sido llamado por Jehová para liberar al pueblo hebreo de su esclavitud en Egipto, pero Moisés no tenía ningún «superpoder» ni alguna habilidad extraordinaria. Lo que tenía era un palo, así como lo lees, un pedazo de madera. Y la biblia lo cuenta así:
(…) Moisés le dijo a Dios:
—Los jefes de Israel no van a creer que te he visto, así que tampoco van a obedecerme.
Entonces Dios le preguntó:
—¿Qué tienes en tu mano?
—Una vara —contestó Moisés.
—Tírala al suelo —ordenó Dios.
Moisés tiró la vara al suelo, y ésta se convirtió en una serpiente. Moisés trató de apartarse de ella, pero Dios le dijo:
—Ahora extiende la mano y agarra la serpiente por la cola.
Moisés extendió la mano para agarrarla y, en cuanto la tocó, la serpiente se convirtió otra vez en una vara.
Alguna vez en la vida esperé tener la voz de un famoso cantante para que «Dios me usara» o el talento musical de cierto artista para «servir a Dios». Pero resulta que Él quiere mostrar su poder con lo que tengo en mis manos. Por eso te pregunto ¿qué tienes tú? La herramienta que tienes puede ser el detonante de milagros y de vidas diferentes, así como leímos en la vida de Moisés. El poder no estaba en la vara, el poder no estaba en Moisés, el poder venía de Dios. No se trata de amuletos, ni de artefactos, se trata de creer que Dios puede usarte con lo que tienes en tus manos.
Quizá eres chef (más conocido como cocinero), profesor de escuela primaria, conserje de tu iglesia, DJ como mi amigo Jota, o eres consejero, acomodador de sillas, escritor de cuentos o poesía. Quizá eres brillante en las matemáticas o en la gramática. Dios quiere mostrar su poder a través de ello.
Quisiéramos que sea una capa supermánica (de Superman) o un superpoder en las mirada que con sólo ver a la gente se cura, cambia y se arrepiente, pero no, Dios usa lo que tienes ahí, en este momento. Por más insignificante que parezca (un blog por ejemplo), si le dices a Dios lo que tienes en las manos, estoy seguro que él te dirá qué hacer con ello para hacer algo realmente increíble.
No esperes que Dios te de algo «valioso» para hacer algo, él da valor a lo que ya estás haciendo. Toma tu vara, ya es hora de ver el poder de Dios.
It’s very impressive and amazing the way God is using you! : )
Estoy sorprendido de encontrar posts donde hay informacion tan util como esta. Gracias por aportar este articulo.
Saludos
gracias por escribir. Dtb :)