La imagen de hoy es tomada de una película mexicana: Amarte duele. Una historia de amor adolescente con todo en contra. Ulises y Renata deciden estar juntos a pesar de la opinión de sus padres y sus amigos, pues eran de estratos sociales opuestos. Aunque es una película y nada más, destaco la manera en que los chicos buscaban alternativas para estar juntos a pesar de lo que estaba contra ellos, y si alguno de ustedes vio la película, recordarán el famoso grito: Uliseeees… Renataaa.
Desde tiempos antiguos, el ser humano ha buscado acomodarse, asentarse, encontrar recursos, aprovecharlos y vivir en calma el mayor tiempo posible, y cuando han aparecido las dificultades, nos movemos y buscamos tener nuevamente condiciones a favor, pero la verdad es que no siempre sucederá, debemos caminar aunque todo esté en contra.
Pasando del mundo cinematográfico al bíblico, pienso en Esteban. Fue el primer mártir de la iglesia, por hacer lo que debía aunque todo estaba en contra de él. Empezó a predicar y lo que decía resultaba muy incómodo para la gente. al punto de que pensaban que estaba blasfemando y decidieron apedrearlo hasta morir.
En la actualidad, queremos que todo esté a nuestro favor para cumplir nuestra misión u objetivos: leyes que nos respalden, que todos nos brinden aprobación y muchos likes, financiamiento, oportunidades. Nos cuesta caminar y encontrarnos con una puerta cerrada. Pienso nuevamente en Esteban, él se encontró con mentes cerradas.
El primer mártir de la iglesia, que nunca se propuso serlo, eligió hacer lo que debía aunque no tenía oportunidades. Siguió a pesar de lo que sucedía, del dolor, de la indiferencia de otros, incluso de quien sería después el apóstol Pablo, que en ese tiempo cuidaba los sweaters de los lapidadores de Esteban. Pudiendo renunciar a sus ideas y al mensaje que debía compartir, no lo hizo, estaba convencido de lo que debia hacer.
Este no es un mensaje motivacional para que conquistes a una chica o consigas un televisor a crédito porque tu estado bancario está en contra. Quiero recordarte que la vida es complicada, y que debemos avanzar aunque encontremos paredes al frente.
Siempre nos dicen que cuando una puerta se cierra, Dios abre otra, pero no siempre lo hace;
Nos han dicho que, cuando una puerta se cierra, Dios abre otra, pero no siempre lo hace; muchas veces tú tienes que golpear la puerta, la ventana, la pared, subirte al techo (como los amigos del paralítico que rompieron un tejado para que Jesús lo sanara, pero otro día hablamos de eso). Tenemos que movernos, seguir, avanzar, correr, caminar, el verbo que prefieras y que se aplique a lo que estás viviendo.
Si sabes que Dios te puso donde estás, o que te encargó aquello que haces, avanza, sin esperar vientos a favor, aunque todo esté en contra.
“¡Sé fuerte y valiente! No tengas miedo ni te desanimes, porque el Señor tu Dios está contigo dondequiera que vayas”
Josué 1:9 NTV