No quiero ser hereje pero pienso que si Jesús diese su opinión sobre la gente que comenta en las redes sociales les diría el título de este post.
Me imagino a los fariseos publicando:
Hemos encontrado a este hombre en el acto mismo de opinar diferente en su muro de Facebook; la ley dice que debemos apedrearlo porque no nos gusta lo que publicó. ¿Qué dices tú, Jesús?
Conozco a tantos cristianos que aprietan los ojos el domingo en la iglesia para simular su cara de santidad pero cuando veo sus respuestas en una red social parecería que están con un pie en el infierno. Qué triste es que los que están llamados a ser luz prefieren lanzar lodo a todo aquel que piensa diferente, escudados en la «libertad de expresión» o mucho peor en la «libertad en Cristo».
Es muy fácil confundirse diciendo «Hermano, tenemos que decir las cosas como son, sin pelos en la lengua» y yo sólo recuerdo que cuando Jesús conversaba con la mujer que tuvo 5 maridos y andaba con uno que no era el suyo, él no le increpó enseguida. Conversó con ella, le pidió agua, una charla amena, y de ahí hizo una pregunta, ella respondió y entonces Jesús se mostró como el Hijo de Dios demostrando saber mucho más de lo que ella imaginaba. No le saludó y le dijo «Hola pecadora, sabes que te vas a ir al infierno?»
En Ecuador, como en Argentina y otros países, la opinión pública está polarizada con respecto a la política. El problema no es pensar distinto, de hecho es necesario, sino el atropello que recibe la gente que se expresa de una manera distinta a la nuestra. ¿Dónde quedó, amigos cristianoides, el proverbio que dice que «la blanda respuesta quita la ira»? Es más fácil atropellar, por supuesto, nos cuesta tanto callarnos y ponernos en los zapatos del otro, aunque esté equivocado.
La próxima vez que insultes a alguien «defendiendo el evangelio» o tu postura deportiva, política, social, emocional, etc, por favor usa la cabeza primero. Recuerda que incluso cuando comentas algo en tu perfil, correo o red social favorita debes amar a Dios y a tu prójimo.
El que esté libre de pecado que critique esta publicación.
Y si tú eres el que insulta a otros tengo una oportunidad para ti: Vete y no ofendas más.